X-E3, una “mirrorless” versátil y accesible
Uno de los modelos más recientes de nuestra Serie X, es la X-E3, una cámara “mirroless” que representa un buen equipo para fotógrafos callejeros y de viaje.
La X-E3 es una cámara de gama media muy completa con una serie de mejoras notables que la hacen una alternativa para quien busca una de las cámaras más poderosas sin invertir en una cámara más grande o de gama alta.
La principal innovación que encontramos en la X-E3 es el salto al último sensor y procesador de la Serie X: el X-Trans CMOS III de 24,3 Mp y el X Processor Pro, que ya encontramos en la estupenda X-Pro2. Una de las adaptaciones más destacadas es la desaparición del flash integrado, para incorporar un flash como accesorio (denominado EF-X8).
En las opciones de conectividad es la primera de la Serie X que incorpora, además del habitual Wi-Fi, conexión Bluetooth de bajo consumo. Esto nos permite mantener la cámara permanentemente conectada con nuestro smartphone o tablet que llevemos encima ganando algunas opciones como la de transferir las capturas automáticamente.
Puede pasar desapercibido, pero tras probarlo resulta un modo muy cómodo de tener un respaldo instantáneo de las fotos que vamos realizando, al menos para poder visualizarlas y compartirlas al instante sin el engorro de tener que lanzar la correspondiente aplicación e ir copiando las imágenes. Eso sí, esto conlleva que la batería tenga una autonomía menor y que si disparamos muchas fotos, nuestro smartphone verá su capacidad de almacenamiento mermada. Además, de que en alguna ocasión la conexión se ha interrumpido y no ha terminado de transferir todas las imágenes, pero, en líneas generales, funciona correctamente.
Esta gama E de cámaras, es una de las más atractivas, por calidad y precio. De hecho, esta X-E3 es una cámara con una respuesta sensacional en líneas generales, con una calidad de imagen global magnífica. Se trata de una cámara muy competitiva en su segmento
En conclusión, es una gran cámara para fotógrafos callejeros y viajeros, por su gran portabilidad y ligereza, su opción de conectividad y su calidad global a un precio muy comedido para lo que ofrece. Con la posibilidad, además, de contar un interesante y amplio catálogo de ópticas. Aunque, claramente, por tamaño y concepto, los más compactos como el mencionado XF 23mm f2 sea una de sus mejores parejas de baile.
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